Más que con ningún otro, tenía una deuda pendiente con este libro, porque lo compré hace ya muchísimo tiempo creo que de rebote con uno de Marayat y con precisamente el de “Orgías en Familia”, que vinieron todos baratitos... y lo había empezado pero nunca había acabado de decidirme a ir en serio con él. Y ahora, después de las clasificaciones pertinentes (es el número 13 de la colección, según la lista confeccionada por mí), digo yo que era el momento...
Sin embargo, el asunto es que este no es un libro cualquiera, sino una especie de experimento sociológico consistente en que unas cuantas mujeres relaten sus experiencias eróticas. Nunca es un mal ejercicio, y supongo que en los años 80’ (cuando se publicó originalmente), debía resultar revolucionario del todo... pero hoy día, visto lo visto y leído lo leído, esta compilación llamada “Placeres” (cuyo título coincide por cierto y a posteriori con una de mis propias novelas eróticas, que espero vea la luz algún día) se queda no ya en una curiosidad, sino en una curiosidad flojilla, donde los mejores relatos son (por supuesto) los publicados sin firma. Y es que los tiempos han cambiado un poco, y hoy ya no es tan importante eso de reivindicar que las mujeres tienen una sexualidad normal y corriente como la de los tíos...
Siendo así, me quedo sin duda alguna con la delicia (sin firma) “Escuchando en la noche” (con el que además me he sentido identificado), con la pasión de “La luna sobre el Soho” (también sin firma), y con la liberación de “Rub-a-Dub-Dub” (también sin firma... y espero que la señora no sólo llegase a congresista, sino que además mantuviese sus hábitos). La mayoría de los demás, para mi gusto, son demasiado “americana pseudoliberada ama de casa con dudas existenciales pero que busca amor de toda la vida a la hora de la verdad”... aunque bueno, hay gustos para todo: insisto en que no es una mala curiosidad, por supuesto, pero tampoco creo que vuelva a leerla otra vez nunca más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario