Son
unos cuantos los libros que tengo sobre la obra de Tolkien que por supuesto no
he leído ni leeré (enciclopedias, bestiarios, blablá... aunque de jovencito sí
me atrevía, sí, y a veces lo conseguía), porque son simplemente de consulta.
Sin embargo, el presente venía con la colección que compré hace años, y
aprovechando que ayer estaba trabajando en mis propias filologías, decidí darle
un empujón y leerme toda la parte de gramática que había empezado hacía ya
tiempo.
Mucho
más que interesante, el trabajo de Baixauli, recogiendo estudios propios y
extraños acerca de la más célebre de las lenguas inventadas por el maestro, que
ayuda mucho a comprender su estructura y que al mismo tiempo nos muestra lo de
siempre. Es decir, que Tolkien era, ante todo y sobre todo, un consumado
filólogo, por lo que los simples mortales sólo podemos jugar con las palabras y
rezar a todos los dioses habidos y por haber para que nuestras construcciones
de nombres propios resulten más o menos acertadas.
Sin
duda, Tolkien era grande: cada vez que uno flaquea en sus propios esfuerzos,
basta echarle un ojo a su amplia estela, y los ánimos vuelven con fuerzas
renovadas.
domingo, 31 de marzo de 2013
sábado, 30 de marzo de 2013
Single: "Telegram Sam" (T.Rex)
Después de una pequeña e inesperada sorpresa (un nuevo single del “Animals” de Dylan en una carpeta de “Free me” de Roger Daltrey, que pienso regalar, aunque la carpeta la conservaré por pura nostalgia y porque no sería la primera vez que apareciese una pieza suelta que encajase en ella), le toca el turno a este “Telegram Sam” de los T.Rex, primer sencillo de su disco “The Slider”, que fue número 1 en Inglaterra en su día (aunque tampoco me parece ninguna maravilla, por cierto).
En cuanto a la cara B, la historia es curiosa, ya que la canción se acredita oficialmente como “Cadillac/Baby strange”, pero parece que en la imprenta española (es la edición original, de 1972) no les quedó muy claro el tema, y optaron por poner una pegatina que dice “Baby strange” sobre la palabra “Cadilac” (sic). Cosas de nuestro país...
martes, 26 de marzo de 2013
"La Guerra de los Mundos" (H. G. Wells)
No hay
duda de que mi amistad con Alberto Santos me ha devuelto el gusanillo por la
ciencia-ficción, que tenía un tanto olvidada. Y si a eso unimos mi afán
completista (la presente edición fue una especial para la revista QUO en el año
2001, colección que constaba de cinco títulos de los cuales ya tenía “¿Sueñan
los Androides con Ovejas Eléctricas?” de Philip K. Dick, “1984” de George
Orwell, y “La Mosca. Relatos del Antimundo”, de George Langelaan, habiéndomelos
leído y disfrutado todos en su día, y faltándome ahora únicamente “Contact”, de
Carl Sagan) y la ayuda del Cash Converters (porque allí lo encontré hace poco
por veinte centimillos), pues eso, que la ocasión la pintaban calva.
Y sí, suponía que me gustaría (no es el primer libro que leo de Wells, y “El Hombre Invisible” ya me dejó impresionado), pero lo que no imaginaba era que me fuese a gustar tanto. Aunque tampoco resulta tan extraño, habida cuenta de que es nada menos que el primero de su especie, es decir, el primero que habla de una invasión extraterrestre por despiadados invasores de tecnología más avanzada que la nuestra. Y eso, por no hablar de su excelente narración, y del desarrollo de la misma hasta ese final tan inesperado como sorprendente debió resultar en su momento (además de confirmar lo de siempre: que Alan Moore es un genio, y que la relectura que hace de este mito en su segundo volumen de la Liga de los Hombres Extraordinarios es todo un prodigio). Que hay muchos libros que leer, vamos, y que es un placer poder recuperarlos así, de forma sencilla y despreocupada, maravillándose al mismo tiempo que pasándolo muy bien...
Y sí, suponía que me gustaría (no es el primer libro que leo de Wells, y “El Hombre Invisible” ya me dejó impresionado), pero lo que no imaginaba era que me fuese a gustar tanto. Aunque tampoco resulta tan extraño, habida cuenta de que es nada menos que el primero de su especie, es decir, el primero que habla de una invasión extraterrestre por despiadados invasores de tecnología más avanzada que la nuestra. Y eso, por no hablar de su excelente narración, y del desarrollo de la misma hasta ese final tan inesperado como sorprendente debió resultar en su momento (además de confirmar lo de siempre: que Alan Moore es un genio, y que la relectura que hace de este mito en su segundo volumen de la Liga de los Hombres Extraordinarios es todo un prodigio). Que hay muchos libros que leer, vamos, y que es un placer poder recuperarlos así, de forma sencilla y despreocupada, maravillándose al mismo tiempo que pasándolo muy bien...
jueves, 21 de marzo de 2013
Volviendo de Granada
Si bien
es cierto que ya volví hace un par de semanas, no podía reseñar ninguna otra
cosa antes de esta, ya que el viaje fue corto pero intenso, y por supuesto, más
que útil: una treintena larga de “Historias de la Tierra Incontable. Círculo
Primero: El Despertar” fue adquirida por el público andaluz, abriendo otro
abanico en un lugar tan especial para mí como es la ciudad de la Alhambra.
Curiosa, como mínimo, fue la experiencia, ya que fue la primera vez que Raúlo y yo firmamos ejemplares del libro codo a codo (como les dije a quienes lo compraron, os lleváis una auténtica pieza de coleccionista), además de que me encontré nada menos que a Christian Osuna, el que fue mi primer jefe allá por el 2000 en la revista “Volumen Dos”. Qué tiempos, qué recuerdos, y qué alegría verle tan bien...
Y digno de mención, el albergue donde pernoctamos Alberto y yo, sin duda el mejor de la ciudad, en esa casa tan especial, en el centro del centro además. No cabe duda: el año que viene, volveremos a Granada, y seguro que nos lo pasaremos igual de bien, si no más.
Y ahora, Barcelona y su Salón del Cómic nos esperan.
Curiosa, como mínimo, fue la experiencia, ya que fue la primera vez que Raúlo y yo firmamos ejemplares del libro codo a codo (como les dije a quienes lo compraron, os lleváis una auténtica pieza de coleccionista), además de que me encontré nada menos que a Christian Osuna, el que fue mi primer jefe allá por el 2000 en la revista “Volumen Dos”. Qué tiempos, qué recuerdos, y qué alegría verle tan bien...
Y digno de mención, el albergue donde pernoctamos Alberto y yo, sin duda el mejor de la ciudad, en esa casa tan especial, en el centro del centro además. No cabe duda: el año que viene, volveremos a Granada, y seguro que nos lo pasaremos igual de bien, si no más.
Y ahora, Barcelona y su Salón del Cómic nos esperan.
domingo, 3 de marzo de 2013
Single: "Nasty sex" (La Revolución de Emiliano Zapata)
Definitivamente, esta colección de singles es de lo que no hay. He aquí un gran éxito (según parece) de un grupo mexicano llamado nada menos que “La Revolución de Emiliano Zapata”, cuyo primer single (una versión más corta que el original, porque aunque no pone duración, no son siete minutos ni de broma, y lo que le quitan es la parte instrumental final más que chula) fue este “Nasty sex” (la edición es la española, de 1971, que por lo que parece, no contiene la misma cara B que el original, aunque los dos temas están contenidos en su primer disco, homónimo) tan peculiar:
Y en la cara B, otro de sus éxitos (aunque más moderado, según parece también), el instrumental “Ciudad perdida (Shit City)”, que haría las delicias de Tarantino, porque parece sacado de una película suya (lo mismo que el primero, por otro lado). Desde luego, vaya un descubrimiento más original...
sábado, 2 de marzo de 2013
"El Cuerpo Tántrico" (Gavin Flood)
Hacía
tiempo que había empezado con él, y curiosamente, ha resultado ser de los que
mejoran (y mucho) conforme avanzan las páginas. Agradecidos tenemos que estar
al sr. Flood por semejante esfuerzo, que sintetiza informaciones más o menos
dispersas, enseñándonos que a) el tantrismo que nos interesa es el denominado
Saiva (colóquese un acento sobre la S); b) que los rituales son interesantes
así descritos pero absolutamente imposibles de aprender por dichos medios; y c)
que como bien dice él, los textos tántricos (en general) no son un conjunto de
doctrinas que seguir ciegamente, sino una especie de interpretación de uno para
ayudar a la interpretación del otro. Como bien decía William S. Burroughs,
“palabras para el que sabe”.
Lástima de lo áridas de las explicaciones, los desgastes (justificados, eso sí) de sus desvelos, y sus teorías en absoluto interesantes, pero así es la palabra escrita en general y la universitaria occidental en particular. Es muy recomendable, al mismo tiempo que es muy prescindible.
“Así pues, en la creación inferior, las almas tienen cuerpos hechos de “maya” con el fin de poder experimentar los mundos. Sin un cuerpo, el mundo no puede ser experimentado y no se puede alcanzar la liberación; sólo a través del cuerpo se experimenta el mundo y sólo a través de un cuerpo se alcanza la liberación. En cierto sentido, el universo es simplemente el juego y la danza de “Siva”, pero en otro sentido, es la manifestación de su gracia que permite a las almas sin principio alcanzar la libertad.”
Y mientras tanto, nosotros seguimos preguntándonos lo de siempre.
Lástima de lo áridas de las explicaciones, los desgastes (justificados, eso sí) de sus desvelos, y sus teorías en absoluto interesantes, pero así es la palabra escrita en general y la universitaria occidental en particular. Es muy recomendable, al mismo tiempo que es muy prescindible.
“Así pues, en la creación inferior, las almas tienen cuerpos hechos de “maya” con el fin de poder experimentar los mundos. Sin un cuerpo, el mundo no puede ser experimentado y no se puede alcanzar la liberación; sólo a través del cuerpo se experimenta el mundo y sólo a través de un cuerpo se alcanza la liberación. En cierto sentido, el universo es simplemente el juego y la danza de “Siva”, pero en otro sentido, es la manifestación de su gracia que permite a las almas sin principio alcanzar la libertad.”
Y mientras tanto, nosotros seguimos preguntándonos lo de siempre.
viernes, 1 de marzo de 2013
En marzo, la Alhambra nos espera...
Cumplido
el viejísimo sueño de escribir una entrada por día en el blog durante todo un
mes, me deleito con descanso a mi manera y me regocijo de ver el montón de
“pendientes” absolutamente eliminado, lo cual no es poco ni mucho menos. La
constancia de haber vuelto a estudiar está dando sus frutos, en todos los
sentidos... aunque hablando de eso, a ver qué día nos dicen las notas del
primer cuatrimestre, y nos dan una alegría (o eso espero).
Mientras tanto, enredados seguimos (que no perdidos) en nuestra Tierra Incontable, puliendo el Círculo Segundo al tiempo que planeamos el próximo viaje a la bella ciudad de Granada, donde espero poder ver la Alhambra de cerca (que de lejos, seguro), aunque a trabajar voy, con el siempre sano objetivo de vender más y más libros en estos tiempos difíciles. Los dioses nos acompañen...
Y lo demás, sobrevivir, que no es poco. Esperar a la primavera, aguardar a que el calor llegue de una vez, y continuar con esta vida estudiantil al menos unos meses más. Las cosas se van poniendo en su sitio, y la nieve debe caer antes de derretirse...
Mientras tanto, enredados seguimos (que no perdidos) en nuestra Tierra Incontable, puliendo el Círculo Segundo al tiempo que planeamos el próximo viaje a la bella ciudad de Granada, donde espero poder ver la Alhambra de cerca (que de lejos, seguro), aunque a trabajar voy, con el siempre sano objetivo de vender más y más libros en estos tiempos difíciles. Los dioses nos acompañen...
Y lo demás, sobrevivir, que no es poco. Esperar a la primavera, aguardar a que el calor llegue de una vez, y continuar con esta vida estudiantil al menos unos meses más. Las cosas se van poniendo en su sitio, y la nieve debe caer antes de derretirse...
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